En Jalisco hay una escala en la diversidad y generalidad de las desapariciones, lo que constituye
una situación de emergencia que amenaza la vida, la salud y el bienestar de miles de personas, indicó el académico de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Jorge Ramírez Plascencia, quien elaboró un reporte especial el tema “La doble desaparición de personas en Jalisco: Crisis humanitaria y silencio gubernamental”, en el que expone que las desapariciones sin resolver van en aumento en la entidad.
“Ayer el gobernador dio un reporte de de seguridad del primer mes, todos son indicadores muy alegres, todos a la baja. Algo que no mencionó fue el tema de la desapariciones, es muy grave porque justamente uno de los problemas de seguridad pública, pues es la desaparición de personas, que sigue aumentando: casi 8 mil casos son de esta administración, en los últimos cuatro años, de las casi 14 mil”, anotó.
El jefe del departamento de sociología de la UdeG lamentó que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, haya omitido el tema en el último reporte de seguridad pública.
Lamentó que 8 mil casos de personas desaparecidas y no localizadas, se hayan registrado en la presente administración estatal, es decir, en los últimos 4 años.
El escrito menciona que el número de personas desaparecidas sin localizar ha crecido en años recientes, a pesar de que cada vez se tienen más mecanismos, y más recursos humanos y financieros para atender el problema.
“La cifra de personas pendientes de saber su paradero, crece a un ritmo acelerado, esto no ha sido reconocido por las autoridades locales, al contrario, la narrativa oficial es que están disminuyendo. En mayo de 2022, en el marco del relanzamiento de la Estrategia Estatal Contra la Desaparición de Personas, se dio a conocer información que presuntamente indicaba un decrecimiento de las denuncias desde 2019, a decir de una gráfica usada en la presentación, mientras que en 2019 se presentaron 466 denuncias; en abril del 2022 hubo 283, esto es 37% menos, lo cual no es coherente con las cifras de denuncias que permanecen sin resolver y que se vienen acumulando año con año”, expresó.
El estudio refiere que la curva de casos que permanecen sin localizar sigue en ascenso. Según la fuente oficial, en 2019 fueron mil 827; en 2020 sumaron mil 734; en 2021 la cifra fue de mil 971, y de 2022 son 2 mil 341, es decir, 7 mil 873 en los últimos 4 años.
El reporte añade que de las 12 mil 303 personas que desaparecieron y luego fueron localizadas, mil 914, se encontraron sin vida, esto significa que la letalidad asociada a la desaparición es mucho más alta en Jalisco que en todo el país. En Jalisco la letalidad de las personas desaparecidas y localizadas es de 16%; a escala nacional es de 7%.
El informe reporta que la desaparición de personas ocurre principalmente en el área urbana conurbada
de Guadalajara; del total de casos, 67% se ubica en municipios de esta área.
En el caso de los hombres, la mayoría de las desapariciones son de varones de entre 10 y 34 años; en el caso de las mujeres, cuatro de cada diez mujeres que desaparecen son niñas adolescentes, jóvenes de 10 a 19 años.
Jorge Ramírez destacó que ya sólo quedan dos años para que el Gobierno del Estado pueda realizar cambios importantes en la estrategia de seguridad.
“Hay un tema que es importante, que se tiene que tratar con la federación, que hay un cartel muy
poderoso en la entidad, que es responsable de las desapariciones y mientras haya una especie de pacto de ‘no nos vemos, pero cada quien respeta su ámbito’, pues van a seguir las desapariciones: detrás de todo está el tema de un cártel poderoso, que no se ha querido combatir, que no se ha podido y con el que más bien hay una especie de pacto, de acuerdo; de ‘aquí así van hacer las cosas'”, manifestó.
Elizabeth Rivera Avelar