Por Elizabeth Rivera
Guadalajara enfrenta incertidumbre en cuanto a la gestión de residuos, según declaraciones del coordinador de Morena, Juan Alberto Salinas Macías, quien señaló la carencia de un plan público claro sobre cómo se abordará la recolección de basura tras el fin de la concesión con la empresa Caabsa el 17 de diciembre.
Salinas expresó que, aunque se ha iniciado un proceso de arrendamiento de 160 vehículos para la gestión de residuos, no se tiene certeza sobre quién operará estos vehículos y cuándo serán entregados.
La concesión actual llegará a su fin en pocos días, y la entrega parcial de los vehículos podría implicar una transición problemática, afectando a las familias de la ciudad justo en el inicio de las festividades decembrinas.
“El problema es que no hay un planteamiento público del que se va a hacer con la gestión de residuos, no está la política pública a la luz de las personas de esta ciudad y en ese sentido estamos ya prácticamente con un horizonte muy cercano al 17 de diciembre, que es cuando fenecen la concesión a la empresa Caabsa y hoy no tenemos la claridad cuándo nos entregan los vehículos terrestres, porque este concepto de entrega parcial podría implicar un camión por semana de aquí, a que lleguemos a la lógica de los 160 camiones va a ser un atropello brutal a las necesidades de las y los tapatíos”, declaró.
La situación, sostuvo, se agrava por la falta de información sobre los costos unitarios y las características de los nuevos camiones, lo que genera inquietud en cuanto al cumplimiento de las necesidades de recolección de basura de la ciudad. Salinas Macías destacó que, de no resolverse la distribución y operación de estos vehículos, el 18 de diciembre podría ser un día crítico para Guadalajara, al enfrentarse al riesgo de que nadie recoja la basura.
El coordinador morenista concluyó que, si bien Caabsa ya no estará en la ecuación tras su salida, la pregunta central permanece sin respuesta: ¿quién se encargará de recoger la basura a partir de esa fecha? La necesidad de un plan efectivo de gestión de residuos, dijo, es urgente para evitar una crisis de salud pública y seguridad urbana en la ciudad.