Por Rodrigo Rivas
Los efectos de la reforma al Poder Judicial se verán a largo plazo y solo el tiempo ayudará a dimensionar sus consecuencias, afirmó el magistrado, Daniel Espinosa Licón; reiteró que desde su punto de vista la modificación, por sí sola, no terminará con los problemas del Poder Judicial.
”La suerte está echada, habrá que esperar, yo creo que esta reforma por si sólo no cambia nada de las condiciones y el estatus del Poder Judicial, no lo creo, porque no están buscando cuáles son los problemas concretos, reales y objetivos del Poder Judicial y cuáles van a ser las soluciones objetivas, con un método y una proyección para mejorar. Siendo objetivos, necesitamos una reforma; una reforma estructural que resuelva los problemas, yo no creo que ésta resuelva los problemas”, dijo.
Aunque aún se pueden presentar controversias o recursos ante tribunales internacionales, el Magistrado consideró inminente la entrada en vigor de la reforma. Recordó que están pendientes las leyes secundarias y las modificaciones a las leyes estatales para su aplicación.