Por Rodrigo Rivas Uribe
Como parte Plan de Justicia para los Pueblos de Temacapulín, Acasico y Palmarejo; el Gobierno de Jalisco solicitó al Congreso estatal autorizar la “desincorporación del dominio público y la enajenación onerosa” de los bienes inmuebles y predios adquiridos cuando se pretendía desalojar las comunidades para inundarlas por la construcción de la presa El Zapotillo.
Se trata de 56 inmuebles que adquirió la Comisión Estatal de Agua (CEA) y 16 que compró el gobierno estatal en la zona que iba a ser afectada. No se especifica los montos que se erogaron en esas adquisiciones. También se plantea donar al municipio de Cañadas de Obregón el inmueble conocido como Taliconyunque donde se pretendía trasladar a las personas desplazadas por la presa.
La propuesta del gobernador deberá ser turnada a la Comisión de Hacienda del Congreso estatal para su dictaminación.
En su momento la Comisión reportó que la construcción de las casas para los desplazados costó 105.7 millones de pesos, son 35 casas, de las cuales sólo siete fueron en algún momento habitadas. Además, entre 2014 y 2019 la CEA pagó 12.3 millones a una empresa de seguridad privada por vigilar el complejo habitacional.
La iniciativa del gobierno estatal especifica que las contribuciones, honorarios y demás gastos que se generen con motivo de la formalización de la donación correrán a cargo del municipio de Cañadas de Obregón.
El Plan de Justicia para los Pueblos de Temacapulín, Acasico y Palmarejo incluye puntos que ya se han cumplido como declarar a Temaca Pueblo Mágico. Otros elementos son declarar al Río Verde como Área Natural Protegida, generar condiciones para el retorno de familias desplazadas, abrir o rehabilitar caminos rurales, así como establecer un centro agroalimentario, reestructurar o construir infraestructura de salud, educativa, recreativa, social, religiosa, deportiva, cultural y turística.
Conformar el Instituto del Chile; un proyecto de agua y saneamiento para las comunidades; sistemas de captación de lluvia, gestión integral del agua y recarga de acuíferos.
En el año 2005 se concretó el acuerdo para la presa El Zapotillo con una cortina de 80 metros y una superficie de embalse de 2,051 hectáreas, luego se modificó para aumentar a 105 metros y traer agua a Guadalajara lo que afectaría a 4,795 hectáreas e implicaba inundar Acasico, en el municipio de Mexticacán, Palmarejo y Temacapulín, en el municipio de Cañadas de Obregón. Pobladores de las tres poblaciones comenzaron una lucha jurídica y consiguieron detener la construcción de la cortina a 105 metros de altura.