El colectivo “5 de Junio Memoria” demanda que las autoridades les regresen de inmediato el antimonumento que habían colocado en la plaza Imelda Virgen, ubicada en Paseo Alcalde, en el Centro de Guadalajara, como acto de memoria del “Halconazo Tapatío”, hechos ocurridos el 4, 5 y 6 de junio de 2020, en las manifestaciones contra el asesinato de Giovani López, detenido por policías de Ixtlahuacán de los Membrillos por no usar cubrebocas. Las víctimas de la desaparición forzada cometida hace tres años por policías investigadores de la Fiscalía del Estado manifestaron que la acción de la autoridad les genera indignación y rabia y reprochan que las autoridades les están negando el derecho a la verdad, justicia y memoria. Así lo señaló una de las integrantes de este movimiento.
“Lo que dice Alfaro es que no se puede poner cualquier cosa, no, no estamos poniendo cualquier cosa, es un símbolo de resistencia, nos acompañaron más de 50 organizaciones y colectivos de Jalisco y de México firmando el comunicado conjunto, que se envió por toda la redes sociales el día de ayer. Entonces ahorita estamos exigiendo el regreso del antimonumento, porque confirma Alfaro que fue una cosa estatal y municipal, por otro lado se contradice con las declaraciones de Pablo Lemus, hechas más temprano, y lo que estamos solicitando es a dónde podemos pasar por el anti monumento, porque sí lo queremos de vuelta. De momento sólo queremos que lo regresen y que no digan después, en dos días o tres que se perdió, que se lo robaron, que alguien más lo tiene, que nos hagan pasar por un laberinto burocrático para recuperarlo, lo único que estamos pidiendo es que lo regresen y después se verán otras acciones coordinadas”.
Manifestaron que es un ‘hecho histórico’ que un Gobierno retire un antimonumento -de los cuales ya hay 8 en México- cuando son actos de resistencia que se colocan con recursos propios de los activistas. Los miembros del colectivo “5 de Junio Memoria” cuestionaron que se haya retirado el antimonumento contra el “Halconazo Tapatío” y no la antimonumenta que se instaló contra los feminicidios en Jalisco.
“Es nuestro derecho como sobrevivientes: tener verdad, justicia y memoria; lo cual no ha ocurrido en el aspecto jurídico, la justicia no ha llegado. En ese sentido la memoria y la verdad pueden ayudar a construir una justicia restaurativa desde abajo, y eventualmente dependiendo de instancias jurídicas, que sabemos que todas son corruptas y que lo que hacen es más bien generar un ambiente de impunidad, que es lo que se vivió el 5 de junio”, expresó la activista.
El antimonumento había sido colocado la tarde de este lunes 5 de junio en el tercer aniversario de la represión policiaca y de la desaparición forzada de manifestantes, era una escultura formada por el número 5 y la letra J, pero ni 12 horas duró la instalación cuando a la medianoche, apagaron las luces del Centro de Guadalajara y seis hombres vestidos de negro, que llegaron en una camioneta pickup de color negra, con con sierras eléctricas y marros la retiraron y se la llevaron.
Elizabeth Rivera Avelar.