Por Rodrigo Rivas
El abasto de agua turbia es muestra de la deficiencia en las políticas de gestión integral del agua y siembra dudas sobre los trabajos de potabilización, sostuvo Josué Daniel Sánchez Tapetillo, especialista en gestión de recursos hídricos; cuestionó la falta de reacción por parte del Siapa para buscar soluciones a la problemática que afecta a miles de usuarios.
“Aunque el agua salga de la planta cumpliendo la Norma Oficial Mexicana que aplica al caso, si se distribuye en una red que tiene 50, 60 años o más, con materiales viejos, por supuesto que se va a contaminar y al final de cunetas el usuario la termina recibiendo sucia en su casa. ¿Qué se requiere? Pues una inversión muy alta, no veo cómo si no hay cambios profundos en el modelo de gestión del agua y en el modelo de operación de este organismo para revertir este rezago que tiene tan grande”, argumentó.
Aunque el Siapa tiene un presupuesto 5 mil 504 millones de pesos, el especialista consideró que no cuenta con los recursos suficientes para renovar la infraestructura que ya está caduca.
El especialista comentó que, en promedio, de 10 metros cúbicos que se abastecen a la red; al final el Siapa sólo cobra alrededor de 6% por las fugas, tomas clandestinas y la deficiencia en la cobranza.