La televisión estatal iraní confirmó este lunes ataques con misiles contra bases militares estadounidenses en Qatar e Irak, como respuesta a los bombardeos del fin de semana contra tres sitios nucleares iraníes. Testigos en Doha reportaron al menos ocho explosiones, aunque no se ha confirmado cuántos misiles impactaron directamente.
El presidente Donald Trump advirtió previamente que cualquier represalia iraní desataría una respuesta militar más contundente. Según fuentes de inteligencia occidental, el ataque era esperado por Washington y sus aliados.
Qatar condenó enérgicamente la ofensiva, calificándola como una violación de su soberanía y anunció que se reservaba el derecho a responder. Aclaró que el ataque fue interceptado exitosamente por sus defensas aéreas y no hubo víctimas.
Reacción global y económica
En paralelo, Israel intensificó ataques sobre instalaciones estratégicas en Irán, incluyendo una prisión de presos políticos. El gobierno qatarí y otros actores regionales llamaron al diálogo diplomático inmediato para evitar una escalada mayor.
En los mercados, el precio del petróleo bajó pese a la tensión, ya que los inversionistas interpretaron que Irán no pretende atacar la infraestructura energética, al menos por ahora. El Brent y el WTI cayeron más de 3%, mientras los mercados financieros mantienen una postura optimista a la espera de más información.