• Jue. Nov 21st, 2024

Importante detectar afectaciones auditivas de manera temprana para prevenir discapacidades

Si su niña o niño no reacciona ante ruidos, no responde al ser llamado por su nombre, detecta retardo del lenguaje o bajo rendimiento escolar, es importante acudir a su unidad de salud para que sea valorado por personal médico e identificar si padece algún grado de hipoacusia que es disminución de la audición o alteraciones auditivas, se estima que tres de cada mil bebés nacen con esta condición. Una detección en los primeros meses de vida puede evitar discapacidad.

Desde 2012, el Hospital Zoquipan abrió el Servicio de Audiología Tamiz Auditivopara detectar y rehabilitar trastornos de la audición, del lenguaje y de hipoacusia desde bebés hasta adultos mayores, valoración del lenguaje niños y adultos, seguimiento del tamiz auditivo y estudios confirmatorios que son los Potenciales Auditivos y apoyo a la terapia del lenguaje.

De acuerdo con especialistas, la falta de orientación provoca que los padres encierren y aíslen a su hijo o hija afectada, cuando es importante estimular al menor para que aprenda lenguaje a señas, desarrollar un oficio, incluso la posibilidad de hablar y hasta asistir a la universidad, mientras su capacidad intelectual se los permita. En el mundo se estima de cada 1000 niños nacidos tres nacen con problemas de hipoacusia.

Cuando se confirma un tipo de sordera o alteraciones auditivas en un menor atendido en algún centro de salud, el paciente y su familia son derivados al Servicio de Audiología del Zoquipan, ahí se brinda apoyo psicológico, rehabilitación pediátrica, neuropediatría y orientación en la Escuela para Padres. La familia es la base para que cada tratamiento se exitoso, el apego a la terapia en el hogar, el correcto uso de los aparatos auditivos y la asistencia a sus consultas médicas son fundamentales.

El Área de Audiología y Tamiz Auditivo se ubica en el edificio de Geriatría a un costado del Hospital General de Occidente, donde se otorga atención a pacientes referidos por Centros de Salud o niños y niñas que nacen en el nosocomio.

Hipoacusia en Adultos

Después de la infancia, toda la población puede desarrollar hipoacusia; por la edad, enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión arterial, que aceleran el daño vascular, por malos hábitos como son el uso de audífonos, limpiarse los oídos erróneamente, por herencia, y también por la exposición a ruidos excesivos, en fábricas o sitios de trabajo.

Actualmente la mayoría de la gente joven que acude por primera vez a una consulta de audiología es a causa de acúfeno o zumbido en el oído (tinnitus), los especialistas también detectaron que durante el confinamiento por la pandemia de Covid 19 se incrementó el uso de audífonos hasta más de ocho horas diarias en el transcurso de la jornada laboral.

El Área de Audiología y Tamiz Auditivo del Hospital Zoquipan abrió sus servicios en 2012, desde esa fecha atiende a recién nacidos y adultos, detectando trastornos de la audición, del lenguaje y diversos tipos de hipoacusia. En 2022 el Servicio de Audiología atendió a dos mil 289 pacientes y en ese mismo año se atendieron dos mil 204 pacientes en Terapia de Lenguaje

SEÑALES DE ALARMA

No reaccionar ante ruidos.

No avanzar en las etapas del lenguaje (balbuceo, sonidos con su boca, llamara papa o mamá).

No responder al llamado por su nombre.

No reconocer el llamado de la mamá, papa o tutor. 

Retraso psicomotor (no caminan, no responden).

Comunicación limitada.

Retroceso en el lenguaje.

Cambiar palabras

Dar información diferente a la que se solicita.

Bajo rendimientos escolar.

Infecciones recurrentes de las vías aéreas.

RECOMENDACIONES

En recién nacidos realizar Tamiz Auditivo dentro de los primeros 28 días de vida.

Realizar valoración en niños y niñas de alto riesgo (prematuros, con tratamientos prolongados con antibióticos).

Ante cualquier proceso infeccioso de vías respiratorias evitar automedicación.

Evitar remedios caseros.

No limpiarse los oídos con hisopos u otros objetos.

Al bañarse evitar tapare el oído; dejar caer agua y jabón.

Vigilar el desarrollo del niño acudiendo periódicamente al médico.

Evitar uso de audífonos.

Evitar exposición al ruido.

Tratar a tiempo y adecuadamente infecciones de oídos.

HAREMY REYES