Por Elizabeth Rivera Avelar
Este sábado inició la demolición del templo de San José Obrero ubicado en la Colonia San José Obrero de Tala, que se desplomó después de que Protección Civil recibiera múltiples reportes sobre grietas y ruidos en las paredes del edificio, situado en la calle Benito Juárez.
El director de la Unidad Municipal de Protección Civil y Bomberos de Tala, Santos Virgen, refirió que el viernes por la tarde, recibieron nuevos reportes de grietas y crujidos, lo que suscitó la intervención del personal de Protección Civil municipal, quienes acudieron al lugar, evaluaron el riesgo y decidieron acordonar el templo y restringieron el acceso.
“Al término del acordonamiento fue cuando se vino abajo, afortunadamente no teníamos personas ahí, pero parece ser que iba a haber confesiones, iba a haber algunos eventos ahí en el interior, así que el acordonamiento que se realizó fue a tiempo y evitamos que pasara a algunas situaciones mayores con las personas que ahí ingresan”, manifestó.
El templo colapsó este viernes poco después de las 6:00 de la tarde, sin causar heridos por las restricciones de Protección Civil municipal, que ordenó la evacuación y prohibición de la entrada al lugar.
El director de la Unidad Municipal de Protección Civil y Bomberos de Tala, Santos Virgen, explicó que ya se tenía conocimiento de las grietas en el templo y se había recomendado una revisión estructural detallada por un ingeniero, la cual no se concretó antes del colapso. Ante la aparición de nuevas grietas el viernes por la tarde, se decidió acordonar el lugar completamente, medida que evitó una tragedia mayor.
En la iglesia estaban programados servicios de confesiones para efectuarse que fueron cancelados debido a la situación de riesgo. Actualmente, el área permanece acordonada mientras se procede con la demolición de las partes del templo que aún no han colapsado, utilizando maquinaria del ayuntamiento para hacer de forma más rápida y segura.
Pese a las recomendaciones de evacuación, algunas personas se han acercado al lugar por curiosidad y para tomar fotografías. Las autoridades continúan en el sitio para mantener el área segura y evitar el acceso no autorizado.
El colapso del templo San José Obrero resalta la necesidad de inspecciones estructurales rigurosas ante los primeros indicios de daño, para prevenir accidentes y proteger a la comunidad. El funcionario subrayó que la intervención oportuna de Protección Civil evitó una tragedia mayor y resaltó la importancia de la prevención y mantenimiento en edificaciones antiguas.