En la Conferencia de Seguridad de Múnich, el alto diplomático chino Wang Yi, uno de los pocos políticos externos capaces de influir en Rusia, anunció que su país lanzaría su iniciativa de paz en el aniversario de la guerra, y ya ha estado consultando a Alemania, Italia y Francia, sobre sus propuestas.
Declaró que el plan de paz subrayaría la necesidad de defender los principios de soberanía, integridad territorial y la Carta de la ONU, pero al mismo tiempo remarcó que se deben respetar los intereses legítimos de seguridad de Rusia, según reportó el medio The Guardian.
Al respecto, Annalena Baerbock, ministra de Relaciones Exteriores de Alemania, dio la bienvenida a la medida de China y dijo que: “como miembro permanente del consejo de seguridad de la ONU, China tiene la obligación de usar su influencia para asegurar la paz mundial”.
Con información de El Universal
Alonso Camacho