Por Elizabeth Rivera Avelar
En el Centro de Justicia para las Mujeres (CJM) de Guadalajara este jueves 13 mujeres que pertenecen a la colectiva Madre Yo sí te creo iniciaron una huelga de hambre en demanda de que los diputados locales aprueben la Ley Contra la Violencia Vicaria.
Responsabilizaron a las autoridades por el impacto que la medida puede tener en la salud de las mujeres que participan, así lo indicó la fundadora de la asociación, Nato Montes.
“La legislatura ha ignorado nuestra lucha y manifestaciones durante estos dos años. No permitiremos que el Estado vulnere nuestros derechos con una ley ineficaz. Exigimos que se legisle la violencia vicaria como una violencia de género, machista y patriarcal, para que las madres puedan finalmente vivir libres de violencia. Responsabilizamos a las autoridades por la situación a la que se verán expuestas las madres quienes iniciaremos la huelga de hambre en condiciones extremas climáticas con temperaturas superiores a los 40 grados. Algunas de estas madres padecemos enfermedades derivadas precisamente de la violencia que hemos vivido a lo largo de varios años”, expresó.
Las impulsoras de la reforma establecieron un campamento permanente en el Centro de Justicia y otras integrantes del Frente Nacional Contra la Violencia Vicaria se ubicaron frente al Congreso del Estado para exigir que la ley pase al pleno.
Las colectivas del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria y Madre Yo Sí te Creo pronunciaron un comunicado en el que lamentan la falta de acción por parte de las autoridades respecto a esta legislación. Denuncian que el Congreso del Estado de Jalisco ha retrasado la aprobación y busca modificar aspectos esenciales de la ley, que originalmente busca proteger a madres y sus hijos víctimas de esta violencia específica.
Señalaron que de acuerdo con declaraciones de Marcela Padilla, diputada de Movimiento Ciudadano (MC), en el Congreso hay bancadas no identificadas que crean incertidumbre y falta de transparencia en el proceso legislativo. A pesar del apoyo que les dieron de palabra varias diputadas y diputados, dicen que no se observan acciones concretas en favor de las víctimas.
Añaden que la violencia vicaria fue reconocida por la Cámara de Diputados y Senadores, y publicada en el Diario Oficial de la Federación el 17 de enero de 2024. Además, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ratificó la constitucionalidad de la violencia vicaria como una violencia de género y machista. Exigen que la legislatura del estado actúe en línea con las leyes federales y cumpla con sus obligaciones.
Alejandra Benítez Medina, miembro de la colectiva, señaló las carencias en la atención a las víctimas en el Centro de Justicia para las Mujeres. Criticó la falta de programas de prevención y de respuestas efectivas por parte de la institución.
Apuntaron que la diputada Dolores López Jara de MC, en una sesión reciente, calificó los reclamos de las activistas como injustos, aseguró que sí trabajan en el tema. Sin embargo, las promotoras de la ley sostienen que los esfuerzos legislativos han sido insuficientes y que la Comisión de Igualdad no ha avanzado más allá de propuestas superficiales.
El apoyo de la justicia y de algunas autoridades ha sido limitado a facilidades logísticas, como la provisión de toldos y mobiliario, pero la demanda central sigue sin resolverse. Las participantes insisten en que no abandonarán la huelga hasta obtener una respuesta definitiva y favorable a la aprobación de la ley.
