Por Elizabeth Rivera Avelar
A un mes de que se cumplan 31 años del asesinato del Cardenal de Guadalajara, Juan Jesús Posadas Ocampo. El abogado que ha llevado el caso, José Antonio Ortega Sánchez, reportó que este sigue en la congeladora y no hay voluntad para actuar en la investigación de este crimen.
“No hay voluntad política para continuar con el asunto de la investigación. Están esperando nada más a que resuelva el Tribunal Superior o el Supremo Tribunal de Jalisco las apelaciones por las sentencias emitidas en contra de algunos de la banda de La Rana para cerrar el asunto”, explicó.
A punto de cumplirse tres décadas y un año del asesinato del cardenal de Guadalajara, Juan Jesús Posadas Ocampo y de seis personas más, no ha habido justicia y el expediente a escala federal sigue abierto, pero sin avances.
En mayo de 2022 el abogado, José Antonio Ortega Sánchez, representante legal del Arzobispo de Guadalajara para este caso, indicó que con la actual Fiscalía General de la República (FGR) no ha habido absolutamente ningún avance en cuanto a la investigación del homicidio del cardenal, ni interés, ni voluntad política de llegar al fondo en la averiguación previa que se abrió en la entonces Procuraduría General de la República (PGR) bajo el expediente Se/001/95.
“No vemos hasta este momento que haya justicia porque a quien fue señalado como haber dirigido el operativo y de estar presente en el aeropuerto en el momento en que se dio la muerte del señor cardenal Posadas Ocampo pues no ha sido imputado, no se ha ejercido acción penal en contra de él y evidentemente nosotros no vemos que haya justicia en el homicidio del cardenal Posadas Ocampo. Son 29 años de impunidad y todavía no conocemos por parte de la autoridad judicial quién y por qué asesinaron al cardenal Jesús Posadas Ocampo”, comentó hace dos años el abogado.
Para el abogado José Antonio Ortega y sus representados en el homicidio del cardenal Posadas Ocampo no hubo confusión y los únicos detenidos a nivel local fueron ‘chivos expiatorios’.
“Fue un ataque directo en contra de la persona de el cardenal, a él era a quien lo querían privar de la vida y lo hicieron y hay varias constancias de cómo cuando llega el carro del Cardenal, que llega a la misma hora que estaba llegando el carro de El Chapo Guzmán por afuera del estacionamiento y el del cardenal por adentro del estacionamiento, con una distancia de 40 a 50 metros, uno de los pistoleros de El Chapo Guzmán, Antonio Mendoza Cruz es cuando le grita a El Chapo que corra porque hay mucha gente armada y le pide que corra se atraviese la calle, el Chapo Guzmán entra al aeropuerto”, reiteró.
El abogado expuso -en mayo de 2022- que cuando un agente del Ministerio Público le preguntó al guardaespaldas de El Chapo, Antonio Mendoza Cruz que si ellos repelieron la agresión, él dijo que ellos no fueron atacados, que los disparos se dieron en otro lado del aeropuerto y que él oyó una voz que dijo “ahí está, ya llegó, es él es él”, refiriéndose a la presencia del Cardenal, no de El Chapo.
José Antonio Ortega apuntó que para él y el grupo que representa existen elementos suficientes para que se ejecute la acción penal en contra de varias personas entre ellas de quien era director de la Policía Judicial Federal, Rodolfo León Aragón, así como otros miembros de esa agrupación policial, quien según testigos estuvieron en el Aeropuerto de Guadalajara el día de los hechos.
“Desde el punto de nosotros sí habría elementos para determinar un ejercicio de la acción penal en contra de varias personas. Nosotros consideramos que hay señalamientos directos claros de que participaron en el homicidio, Rodolfo León Aragón quién era el director de la Policía Judicial Federal en el momento en que el cardenal fue privado de su vida”, expresó.
El abogado dijo desconocer quién fue el actor intelectual del magnicidio.
En 2022, el entrevistado insistió hace dos años en que ellos disienten de la versión y de la línea de investigación que llevó la Fiscalía Estatal en el juicio local o del fuero común en el que se acusó del asesinato al cartel de Los Arellano Félix, comandado por Humberto Rodríguez Bañuelos alias “La Rana” contra quien se ejerció acción penal al igual que de varias personas acusados de cometer el homicidio del Cardenal Posadas. Humberto Rodríguez Bañuelos fue detenido en marzo de 2001 y murió de un infarto el 30 de enero de 2018 en el Antiguo Hospital Civil de Guadalajara donde fue trasladado bajo custodia por la solicitud de un amparo.
Ortega Sánchez, manifestó que la vez que estuvo presente en la declaración que se le tomó a Joaquín Guzmán Loera el Chapó Guzmán, en marzo del año 2000, cuando estaba en el reclusorio de Puente Grande, el capo manifestó que el asesinato de Posadas Ocampo ocurrio como la versión que dio Jorge Carpizo MacGregor, quien ocupó los cargos de Procurador General de la República y Secretario de Gobernación y que presentó en un vídeo al que luego se le denominó como “Nintendo”.
“Nosotros le tomamos una declaración en marzo del 2000 y ahí en Puente Grande, cuando todavía estaba en México y el prácticamente lo que dijo fue que las cosas eran como las había manejado el doctor Carpizo en su Nintendo y cuando yo le pregunté, qué a ‘¿qué fue al aeropuerto de Guadalajara, quien lo había citado y por qué razones estaba ahí?’ él inmediatamente volteó a ver al agente del Ministerio Público y le dijo no, ‘que de eso no íbamos a hablar’ entonces el Ministerio Público le dijo que ‘este abogado te quiere clavar’ y a partir de ese momento el Chapo Guzmán ya no quiso contestar ninguna pregunta”, relató el jurista.
Cabe recordar que en el juicio local y la versión que sostuvieron algunas autoridades fue que el cardenal fue ejecutado por sicarios del cártel de narcotráfico Arellano Félix, quienes lo confundieron con El Chapo Guzmán, líder del cártel de Sinaloa.