Por Rodrigo Rivas
De fresa, crema de leche, piña o atún, comenzó la venta de empanadas en Guadalajara, una costumbre muy tapatía en el periodo de Semana Santa.
Aunque el permiso para vender inició desde el pasado domingo, los comerciantes señalaron que los días fuertes son a partir del jueves santo con la tradición de la visita a los siete templos.
“Bueno es una tradición que ya se trae desde hace muchos años, nosotros en mi familia ya somos la tercera generación, primero fueron mis abuelitos”. “La clásica siempre va a ser la de leche o si no la de atún; son las más que se venden, con lo que son las empanadas dulces que son las de cajeta, las de piña o las de fresa”. Es de todos los años y solamente es en estas fechas, lo tradicional solamente es aquí”, comentaron vendedores.
Los puestos de empanadas se colocan en las inmediaciones de la Catedral Metropolitana y de los templos de San José de Gracia, San Juan de Dios, Santa Mónica, la Merced, Capuchinas, Santa Teresa de Jesús, Sagrario Metropolitano, Santuario de Guadalupe, San Agustín, San Francisco, Aranzazú, Santa María de Gracia y el Templo del Carmen. El permiso para instalarse vence el 7 de abril.
Además de los sabores clásicos, se ofertan otros como chocolate, cajeta, membrillo, camote, nuez, rompope, durazno, manzana, coco, zarzamora, crema de avellanas, rajas con queso y queso crema; entre otros.