El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) efectuó recomendaciones para evitar afectaciones a la salud, ante los altos niveles de contaminación y la baja de temperaturas que se suelen registrar el fin de año. El neumólogo adscrito al Hospital General Regional (HGR) No. 110 en Jalisco, Julián Cárdenas Solorio, señaló que en la época invernal se deben extremar precauciones, sobre todo quienes tienen antecedentes de enfermedades respiratorias, ya que son más vulnerables a complicaciones.
“Desde octubre hasta febrero, que es la época de también todas las infecciones respiratorias, y simplemente por los cambios de temperatura, y ahorita en estos días que ha bajado mucho rápidamente, los pacientes que ya se conocen con una enfermedad como asma o EPOC, o enfermedades como fibrosis pulmonar, algo así más crónico, sí se descompensan casi siempre en esta época. La idea en ellos es que tengan su tratamiento, o sea que no lo dejen, o a veces necesitan ajustes de tratamiento en estos casos, y en personas que no se conocían con enfermedades previamente, a veces es cuando debutan, que empiezan con los síntomas”, explicó el médico.
El médico indicó que, aunado a las bajas temperaturas, durante esta temporada los pacientes con antecedentes de enfermedades respiratorias pueden presentar descontrol o incluso tener mayor riesgo de complicaciones con otros cuadros de patologías virales o bacterianas.
El especialista recomendó tomar medidas preventivas, entre las que están: cerrar ventanas y puertas en la noche para evitar que ingresen humos a las casas, producto de la quema de pirotecnia y de combustibles; también recomienda no salir al exterior en las primeras horas de la mañana o hacerlo con cubrebocas, ya que las partículas contaminantes o hidrocarburos se quedan atrapadas en una posición baja en el ambiente, y es más fácil respirarlas.
El doctor en medicina indicó que las afecciones por contaminación invernal pueden traducirse en diversos síntomas molestos, iniciando por tos.
“El primer síntoma casi siempre es tos, porque es el mecanismo de defensa más frecuente del pulmón, ya que algo le está molestando y busca eliminarlo. Puede ser una tos sin flema, que sea seca o solo irritativa, puede acompañarse también de molestia en el pecho o en la espalda, se puede sentir como “apretado”, significa que los bronquios están comprimidos: se pueden escuchar sibilancias al respirar, sobre todo en pacientes asmáticos o ardor en garganta o nariz”, detalló.
Respecto a la toxicidad de los elementos que prevalecen en el medio ambiente, refirió que depende mucho del tamaño de las partículas; generalmente las que hacen más daño son las menores a 2.5 micras, porque son las que llegan al alveolo, que es la parte más fina del pulmón y es ahí donde ocasionan más inflamación, cuando hay complicaciones de cuadros o existe mucha inflamación en todas las vías respiratorias.
Elizabeth Rivera Avelar