La deuda que tienen dependencias públicas con el Instituto de Pensiones del Estado, debido al atraso en las aportaciones, se ha disminuido un 76%, en la actual administración. El monto total pasó de 1,040 millones de pesos en 2018 a 245.9 en el reporte de junio pasado.
El director del Instituto, Héctor Pizano Ramos, consideró que la recuperación de recursos avanzó con la reforma aprobada en la pasada Legislatura con la que, en caso de atraso en el pago, el monto de las aportaciones se descuenta de las participaciones estatales que le corresponden al municipio o dependencia deudora.
“De los 1,600 millones de pesos que teníamos de adeudos, ya estamos sobre menos de 300 millones; hemos avanzado totalmente en el cobro. Ya con la reforma que se aprobó en el 2021 ya no hay manera de que te vuelvan a deber”, informó.
Hay 23 dependencias con aportaciones atrasadas, el mayor adeudo lo tiene el municipio de Autlán con 92 quincenas vencidas y pendiente de reportar 63.5 millones de pesos.
Han incumplido convenio de pagos el municipio de Gómez Farías, el DIF municipal de Puerto Vallarta y el Instituto de la Juventud de Tonalá.
Rodrigo Rivas Uribe