Con testimonios de la violencia política que padecen mujeres de pueblos originarios, el Instituto Electoral del Estado realizó un foro para visibilizar esta problemática que afecta la participación femenina en las comunidades.
Marissa Velázquez Ramírez, relató que recibió amenazas de muerte y un intento de secuestro cuando intentó participar como representante de su comunidad, destacó que salió adelante gracias a las redes de apoyos de mujeres que la respaldaron.
“Falta mucho por construir en Jalisco en el tema político de las mujeres en general, porque así como en su momento yo me sentí en riesgo mi integridad, se que muchas mujeres que no son de pueblos originarios lamentablemente perdieron la vida en ese proceso”, expuso.
La activista planteó que se debe dar más capacitación a las mujeres para que se decidan a participar y también a los partidos para que las respalden y no obstaculicen su incorporación a la actividad política.
Añadió que se debe resaltar la multiculturalidad de Jalisco y dejar de dividir a las pueblo originarios y migrantes.
Rodrigo Rivas Uribe