Por Edgar M. García
Durante el Clásico Regio número 140 entre Tigres y Monterrey, el arquero de Tigres, Nahuel Guzmán, protagonizó una escena inusual al colocarse de espaldas a Sergio Ramos mientras este se preparaba para ejecutar un penalti.
A pesar de la táctica de distracción, Ramos convirtió el penalti y celebró al estilo característico de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, Tigres logró remontar en los minutos finales, con goles de Sebastián Córdova y Nico Ibáñez, para llevarse la victoria 2-1.